El Ayuntamiento de Barcelona sigue progresando en sus planes de aumentar el parque de vivienda pública en la ciudad.
Junto al Institut Municipal de l’Habitatge i Rehabilitación (Imhab), acaba de adjudicar un proyecto para construir cuatro edificios destinados al mercado residencial y de alquiler social.
Las nuevas viviendas se levantarán en el barrio de Sant Martí y en total sumarán 151 nuevas viviendas para alojar a unas 350 personas.
Dentro de los requisitos de la licitación, los edificios debían incluir procesos de construcción sostenibles. Tres de los edificios se construirán con madera CLT, es decir, madera contralaminada cruzada. El cuarto edificio se construirá con módulos de metal, utilizando técnicas industrializadas para su construcción.
Estas nuevas promociones incluyen la construcción de 42 viviendas en el número 477 de la calle Pallars, cuarenta viviendas en el Passatge d’Arrissena, donde se realizarán cuarenta viviendas y 45 pisos en el 180 de la calle Marroc.
La inversión municipal para estos nuevos edificios residenciales se estima en unos veinte millones de euros.
Estas nuevas promociones se suman a las la 135 viviendas industrializadas que se concedieron en el distrito de Sant Andreu, con una inversión de 11,7 millones de euros por parte del Consistorio que podrá alojar 340 personas.
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